viernes, 7 de agosto de 2015

Milagro

Dicen que las personas nacemos para vivir un milagro, ya sea tener suerte en el juego, en el amor o en la vida. Algunos creen que el primer amor, el segundo, o el padre de sus hijos será su gran milagro. Quien sabe ¿no?
Yo lo que creo es que la vida nos pone en el camino de personas a las que adoraremos, que será un amor pasajero del que solo guardaremos bellos recuerdos, y el resto de nuestra vida pensaremos en aquello que pudo ser, y por suerte o por desgracia no fue. Pero al darte la vuelta en la cama, ves que eres feliz, que no todo aquello que amamos con todas nuestras fuerzas nos puede pertenecer, y que si miramos a través de todo lo que nos nubla nuestra mente, aunque sea el gran amor de nuestra vida, debemos de mirar la vida con cierto optimismo, ya se tenga diecisiete, veinte, treinta o cuarenta años.
La vida no acaba cuando el milagro que creíamos tener perdemos, la vida continua y no espera a que queramos reparar nuestro interior.
Todo lo que vivimos en la vida lo tendremos en nuestra mente, aunque ya no recuerdes su voz, su olor o incluso su manera de hacerte reír, en unas semanas, meses o incluso años, cuando seamos mayores, recordaremos como era esa canción que te recordaba a la persona especial, y aunque el paso de los años no te deje recordar su nombre, algún día escucharas su voz, aunque solo recuerdes que era esa chico que te hizo suspirar, llorar y reír mas de la cuenta.
Y si realmente cuando seas mucho mucho mucho mas mayor, solo recuerdas a aquella persona con la que compartistes tu primer amor, tu segundo y con el que compartes a tus hijos, pues quiere decir que el milagro de tu vida fue esa persona.
Asi que no vayas buscando el milagro que quieras que se cumpla en tu vida, ya que los mejores son los que no se esperan, o los que esperar toda la vida para volver a poder ver.